Información para esposas

[Koala]

Esto lo he encontrado por internet y he hecho un corta y pega.

Información para nosotras. Castidad masculina controlada

No es ningún secreto que muchos hombres son más felices en castidad, o al menos cuando se les controla masturbaciones y orgasmos. Son más felices ¿Y por qué no deberían serlo? La cantidad de beneficios que se nos ofrece a las esposas ese estilo de vida de castidad masculina son muchos. El hombre que ofrece su castidad controlada a la mujer que ama dejará de ser tosco, indomable o agresivo para pasar a ser equilibrado, considerado, adorador, dócil y obediente y así feliz y voluntariamente realizará cualquier trabajo o tarea que su esposa le pueda ordenar.

Pero, ¿cómo funciona esto? ¿De qué se trata la castidad controlada que anima a un hombre a mejorar? Una vez que un hombre ya no esté enfocado tan intensamente en su orgasmo y excitación, podrá volver su mente a otras cosas. Muchos hombres en castidad informan sentirse más concentrados, más productivos, más fuertes y más fácilmente capaces de dirigir su atención a las tareas que les encomendemos. Por supuesto su satisfacción, cuando se completan estas tareas, también es mayor ya que ya no están trabajando simplemente por su propia satisfacción, sino también con el propósito de complacer a la esposa.

Entendemos por control de castidad masculina, el control que ejerce otra persona mediante la posesión de la llave que cierra el llamado dispositivo de castidad, elemento que se coloca en testículos y pene que encierra esa parte masculina. La guardiana de la llave gestiona, controla y decide de forma absoluta sobre la parte genital del hombre.

Cuando tenemos la suerte de disfrutar de un hombre que nos pide su control sexual no debemos dejarlo en saco roto sino aprovechar la oportunidad que se nos ofrece. Pero el hombre por sí solo no tiene la fuerza de voluntad para conseguirlo, debemos ayudarle agregando un dispositivo de castidad masculina, una jaula de castidad, para conseguir controlar su sexualidad y obtener los beneficios que ello conlleva a la pareja.

He encontrado este testimonio de un hombre en castidad “El secreto es que renuncias voluntariamente a tu libertad sexual que otorgas como control a la pareja y que sin entenderlo del todo hasta que no lo vives, no te das cuenta de lo absolutamente increíble que es. He logrado controlar mis impulsos más profundos. Además, tienes el respaldo de cientos de miles de parejas que están optando por este tipo de sexualidad y vida, y esto es porque funciona. Que tu pareja controle tus orgasmos, tu placer, además de intensificar el suyo propio, hará que no quiera perderse esa experiencia y, por supuesto incorporarlo para mejorar la relación. En definitiva, ella se ha convertido en mi Princesa encantada y yo estoy dispuesto a todo por ella.”

La negación del orgasmo masculino con la jaula tiene dos intenciones. Una, la función del dispositivo es prevenir la realización sexual, incluso impide que se puedan tocar, y dos, al mismo tiempo proporcionar al hombre un potente estimulante asociado a complacer a su ama.

Por lo tanto, cuando tu marido empiece a degustar los placeres de tu control, no querrá abandonar esa forma de funcionar.

Los beneficios que aporta la castidad del hombre controlada por la pareja son muchos. Hay muchos aspectos positivos en la castidad forzada (con jaula) del hombre, enumeraré los que se consideran los más significativos:

 – No a la masturbación. Evitando que el hombre pierda tiempo y energía sexual con la masturbación ésta revertirá hacia la mujer. La testosterona, después de la masturbación baja considerablemente por lo cual, si no hay masturbación no hay bajada de su atención y podrás aprovechar toda su energía para complacerte mucho mejor en lo que le pidas.

– La vida sexual mejora. Puesto que él estará deseando complacerte sexualmente (con caricias, besos…) para suplir en algo su falta de placer. Es más, un hombre en castidad disfrutará mucho cuando vea que tu gozas aunque él esté encerrado. Se centrará en tu placer y no en su orgasmo, que lo tiene vetado. Tendrás más y mejores orgasmos, más caricias y más masajes que nunca y recibirás más atenciones, más pasión y más cariño cuándo y cómo quieras.

– Mejor comunicación. La castidad masculina fomenta la comunicación abierta y honesta sobre las necesidades del otro. Este aspecto es muy positivo puesto que con el tiempo es algo que se ha ido perdiendo. La castidad forzada mantiene al hombre en un estado permanente parecido al noviazgo por lo que la castidad forzada puede ayudar a mejorar el vínculo natural de la pareja.

– Relación romántica. Sabemos que el romanticismo va disminuyendo con los años y que lo que antes era “Cuidado mi amor con el charquito” puede transformarse en “¡Anda atontada cómo te has puesto con el charco!, ¿por qué no miras dónde pisas?”. La castidad forzada con jaula y controlada hace que el casto pueda ser reconducido para ser aquel hombre romántico que se quedó por el camino.

– Fidelidad. Es curioso resaltar el hecho de que los impulsos físicos o instintivamente animales de nuestro hombre dejan de existir para ninguna otra mujer que no sea su ama, por lo que la única mujer en la que estarán centrados será en la que han depositado la llave de su castidad.

– Decir No. Si algo no apetece pues no apetece y no se hace. En ocasiones la mujer, menos sexual que el hombre, por regla general hace algún que otro esfuerzo para complacerlo. Pues esto ya se acabó. El hombre en castidad se vuelve tremendamente agradecido con cualquier estímulo por pequeño que sea, beso, caricia, mirada, lo agradecerá, igual que si te burlas de negarle su placer. Ningún hombre, con tan poco esfuerzo por tu parte, será mejor que el tuyo, atento, cariñoso, romántico, buen amante…. Pero ¿qué más se puede pedir? Ahora somos nosotras quienes decidimos cuándo, cómo y dónde de todo.

– Dormirás mejor. Se acabarán las molestas erecciones nocturnas con las que te despiertan por la noche buscando un acercamiento sexual. Controlado mediante jaula esas erecciones llegarán a no producirse por lo que descansareis los dos mejor. Solo se producirán cuando tú quieras y así lo liberes de la jaula.

– Útil en la casa. El hombre, sabiendo que la única forma en que puede obtener la liberación de la jaula que tanto anhela es complaciéndote, en realidad se ofrecerá voluntariamente a realizar cualquier tarea para agradar tu vida, tal como lavar los platos, limpiar el baño, planchar, hacer la cama cada mañana o incluso adelgazar. Se sentirá mejor consigo mismo y será él quien te lo proponga para que te sientas feliz. ¿No es hasta increíble?

– Son esclavos de la libido. La mayoría de los hombres se avergüenzan de masturbarse tan a menudo como lo hacen. Pero la mayoría de las veces no pueden hacer nada para evitarlo, tienen el hábito de los monos, les apetece, pueden y se tocan casi sin pensarlo, no se plantean el no masturbarse y si se lo plantean no le dan importancia. Es una adicción. Sobre todo les hace sentir como niños pequeños que no pueden controlarse a sí mismos. En el momento que nosotras ejercemos ese control y el saber que pueden superar esa adicción y pasar tiempo sin manipularse crece su confianza y se sienten orgullosos. Canalizar su líbido hacia su pareja y no hacía el pañuelo de papel le hará madurar para siempre.

¿Cómo elegir la jaula apropiada para lograrlo?

Cada vez más, en internet se pueden encontrar muchos dispositivos de castidad para hombre. Hay de distintos materiales, colores, modelos y de todos los tamaños. Lo importante es escoger la medida apropiada e ir probando. Al principio notarán algo extraño pero, después de un periodo de adaptación, poco a poco se les hará casi tan imprescindible que muchos hombres se sienten desnudos cuando no lo llevan. Además, lo pueden llevar en cualquier momento o lugar porque pasa desapercibido.

En cuanto al tiempo de utilización cada pareja debe pactar, según sus necesidades, el tiempo de colocación de la jaula. Algunas solo las utilizan cuando el hombre está en casa, otras cuando el hombre no está con la esposa, otras pactan llevarlo por el día, otras solo por la noche y muchas parejas llegan a pactar utilizarlo las 24 horas del día y únicamente las abren para satisfacción de la mujer o para su limpieza. Eso sí, dentro de lo que se pacte, nosotras debemos tener el poder de gestionarlo según nuestro criterio.

Es un juego es perfectamente practicable y compatible con una vida absolutamente normal ya que no es perceptible por ninguna ajena al juego.

Si os decidís poner a vuestro hombre una jaula, lo agradeceréis de por vida. No hay nada como tenerlo dócil y que esté pendiente en todo momento de ti, agradándote la vida y mirando por tu bienestar y placer sin tener en cuenta su única satisfacción como sucedía antes de encerrarlo.

[peqe75]

Gracias Koala, por el artículo que traes

[salva35]

Impresionante, muy bueno!!
Muchas gracias por compartirlo aquí.

[Mej]

Guau

[Ichastely]

Está bastante lejos de la realidad.

La testosterona tiene ciclos, aumenta y disminuye aunque no haya eyaculación.

Si los niveles de testosterona son altos, no hay romanticismo, es pura sexualidad agresiva.

Cuando los niveles de testosterona son altos, no se duerme mejor, no te concentras más en hacer deporte, ni en los estudios, sólo piensas en el sexo.

Las erecciones libres, no nos despiertan por la noche, en la jaula sin embargo, son muy dolorosas.

El hecho de tener un dispositivo de castidad, no garantiza fidelidad, pues hay muchas maneras de mantener relaciones sexuales y es muy fácil quitarse un dispositivos de castidad.

La cuestión no es poner una jaula a un hombre, es que quiera llevarla libremente.

A pesar de todo esto, yo la llevo libremente y me encanta. Lo importante es la fuerza de voluntad, sin embargo lo que pone en el post, no tiene ni pies, ni cabeza.

[peqe75]

Ichastely escribió

Está bastante lejos de la realidad.

Yo creo que en algunas cosas que señalas tienes razón, y en otras doy la razón al texto.

A mí sí que me ocurre eso de que cuando me contengo estoy más cariñoso (y más sumiso) con mi mujer.

En mí puedo decir que eso que se cuenta tanto en foros de esta temática sí es cierto y sí ocurre.

Si eres alguien con costumbre de masturbarse a diario, evidentemente la castidad trae más beneficios que peros. Yo estuve un año entero sin eyacular (sin jaula) y en general mucho mejor. No era estricto y me permitía de cuando en cuando estimularme, pero con control.


En mi caso y más allá de los ciclos naturales, no me hace más agresivo sexualmente si no más sumiso (seguramente porque la sumisión es lo que me excita y una mayor contención sexual mantiene esa tensión que se manifiesta en deseo de sumisión), y en el acto sexual estoy mucho más atento a su cuerpo para maximizar su placer que mí mismo, y fuera de éste mucho más romántico y atento a ella.

Estoy sin embargo de acuerdo contigo en que lo principal es querer llevarla. Llevarla obligado por la otra persona de forma forzada no sólo es absurdo y seguramente contraproducente sino probablemente hasta delito. Querer jugar a ser forzado por ella, porque te gusta que se te imponga y te "fuerce" llevando la llave y dependiendo realmente de ella para quitarla es otra cosa.

También veo tonta esa afirmación de que impide la infidelidad. Yo no puedo jugar a animar a mi mujer a ponerme jaula con ese argumento, primero porque la fidelidad parte del corazón y la voluntad de uno mismo, y segundo porque, como bien dices, hay muchas maneras de ser infiel sin que medie necesariamente la penetración del hombre a la mujer. Es más, proponer la jaula a la mujer podría ser fruto de una relación infiel con una señora (o señor) externos dominantes que te lo imponen, por ejemplo.

Sobre las erecciones nocturnas con jaula no puedo opinar de primera mano. Sólo sé, por lo leído eso de mejor pequeñas que grandes, entre otras cosas para minimizar esa situación.

En general y a excepción del punto de la fidelidad y del punto de las erecciones nocturnas validaría el resto del texto: pienso que tiene bastante razón. Eso sí, contando con que la parte masculina sea sumisa per sé (su excitación se active con la sumisión) y se avenga a estar encerrado y controlado. Si no, creo que el castillo de naipes no se sostiene.

[Mej]

Al igual que Peqe,  yo tampoco estoy de acuerdo con Ichastly. El relato es bastante real en el mundo de la castidad en pareja con el consentimiento del hombre, como se dice al principio del artículo "ofrece su castidad".
Si logras mantenerte casto, el nivel de libido suele ser alto para estar más pendiente de tu mujer, mucho más si ella está agradecida por esa situación.
El ánimo también es mayor y por lo tanto las energías que no se gastan el sexo se pueden reconducir a otras actividades más productivas para ti y sobre todo para ella.
Las erecciones nocturnas van desapareciendo con el uso de la jaula por lo que desaparece la excusa de estar empalmado.
Sobre la fidelidad, al estar encerrado voluntariamente, ya que ella no quiere la llave, no puedo opinar, pero pienso que se dará un tipo de síndrome de Estocolmo en el que ella será la única en la que se piensa.

Por lo tanto lo veo como un artículo muy válido.